Para aplicar el Lean en tiempos de crisis, empecemos con las reflexiones de un sabio como Einstein:
- Las crisis traen progresos.
- La angustia empuja a la creatividad (algo bueno tiene que tener…).
- Quien supera la crisis, se supera a sí mismo, sin ser superado.
- ¿Y si te dijeras que “la única crisis es no querer superarla”?
Los cuatro pasos imprescindibles
Pasemos a la acción, siguiendo estos cuatro pasos de la metodología LEAN:
- Designar una persona “agente del cambio”.
- Obtener una formación de LEAN básico.
- Aprovechar o “crear” una CRISIS.
- Conocer bien el flujo de valor de tu organización.
Y sobre la importancia de la ACTITUD ante el cambio: Ésta es más difícil de conseguir. Desde nuestra experiencia, la actitud es lo que necesita más acompañamiento y tarda más tiempo, pero perdurará para siempre.
Lo positivo es que ese cambio depende de cada uno de nosotros y beneficia a la personalidad de la organización.
Resistencias
Estas son las resistencias que suelen presentarse en el camino al cambio:
- Resistirse porque “no sé”.
- Resistirse porque “no soy capaz”.
- Resistirse porque “no estoy dispuesto a hacerlo”.
La “ventaja” es que, en tiempos de CRISIS, estas resistencias se deberían hacer más pequeñas y se logra poner bases para el futuro.
Objetivos
Por último, debemos recordar los objetivos de una empresa respecto a sus clientes, que deben estar siempre en el centro de nuestras acciones:
- SATISFACER las necesidades del cliente.
- SUPERAR sus expectativas.
- SORPRENDERLO positivamente.
- FIDELIZARLO.
El sistema de análisis KANO ayuda a alcanzarlo a través del cuestionamiento ¿qué es lo que da valor a mi cliente y qué está dispuesto a pagar por ello?
- Lo que quiere (necesidades).
- Lo que espera (expectativas). Dividido en tres categorías:
- Expectativas “que debe tener”: si no se cubren, el producto no estará en el mercado.
Ej. En una cafetería tiene que ofrecerse un café caliente en una taza limpia.
- Expectativas “más que mejor”: se compara entre competidores.
Ej. Qué tipo de café y envase ofrece cada cafetería.
- Expectativas “latentes”: ni siquiera el cliente las conoce aún.
Ej. En una cafetería del futuro, me gustaría un espacio dedicado sólo a chocolates, que me reconozca al entrar y me conecte automáticamente al wifi…).
Con estos tres ejes de trabajo bajo el KANO, marcamos el presente y el futuro de la estrategia de nuestro producto o servicio.
¡HAZTE LEAN, sigue el camino del KANO y lograrás superar las CRISIS!